Desafío de Impacto al Máximo
Alcanza al Mundo en Una Generación
“Como alguien que ha comprometido mi vida a seguir a Jesús, ahora estoy listo para vivir como un discípulo lleno de Su Espíritu y guiado por Su Espíritu. Me comprometo a ser un aprendiz de por vida y un hacedor de discípulos. Me negaré a mí mismo, tomaré mi cruz y arreglaré mi agenda para reflejar las prioridades del Reino. Me enfocaré en ganar personas para Jesús constantemente y dedicar mi vida a ayudar a esas personas a convertirse en hacedores de discípulos, transmitiendo la visión a través de relaciones de mentoría. Estoy listo para hacer esto ahora o para recibir capacitación sobre la marcha junto con alguien mientras aprendo a hacer esto en los próximos meses.”
Si acepta el Desafío de Impacto al Máximo , está asumiendo el desafío de convertirse en un discípulo que madura continuamente y que está comprometido con la meta de hacer, guiar, madurar y multiplicar discípulos de Jesús. Para ayudar a facilitar este tipo de crecimiento, también se le anima a desarrollar específicamente su vida espiritual de las siguientes maneras:
Cambiaré las prioridades de mi horario para poder asistir a las reuniones semanales de tutoría con otras personas que han aceptado el desafío. En estas reuniones descubriré mis necesidades y satisfaceré las necesidades de los demás para desarrollar las habilidades para la vida necesarias para tener una relación madura y fructífera con Dios, la iglesia y los perdidos (oración, estudio de la Biblia, confesión, manejo del tiempo, manejo del dinero, motivación, etc.). habilidades interpersonales, etc.). Recuerde: no puede liderar a donde no irá y no puede mostrar lo que no sabe.
Pasaré constantemente por las tres fases de crecimiento; 1) Fundamentos del cristianismo, 2) Primeros 40 días de vivir una vida de impacto y 3) plan de estudios personalizado que se enfoca en el crecimiento de las personas en mi grupo de mentoría. En la fase 3, las personas son el plan de estudios, por lo que personalizaré lo que se necesita en mi grupo para lo que funcione mejor para fructificar espiritualmente . Cada vez que alguien nuevo toma el Desafío de impacto al Máximo está dispuesto a pasar por la serie Fundamental, comenzaremos de nuevo con la fase uno, reafirmando en nuestras propias vidas las verdades enseñadas en nuestro interior.
Seré voluntariamente responsable ante los demás miembros de su grupo dentro de límites saludables.
Aprenderé de otros que utilizan los recursos disponibles de aquellos que son efectivos en hacer discípulos. Esto podría verse como videos, conferencias, capacitaciones, recursos en línea, etc.
Haré un esfuerzo concentrado para guiar a los inconversos que están iniciando a través del proceso de conversión, animándolos a recorrer los fundamentos del cristianismo conmigo mientras construyo una relación de mentoría de confianza con ellos. En el momento apropiado, los invitaré a formar parte de mi grupo de mentores.
Mientras hago discípulos, ayudaré a esos discípulos a hacer otros discípulos e inculcarles la visión de la gran comisión a la que Jesús ha llamado a todos sus discípulos. En un momento apropiado de su caminar espiritual (generalmente después de la fase 1), los invitaré a tomar el Desafío de Impacto a Máximo también.